lunes, 20 de enero de 2014

No More Room in Hell... un juego fruto del HAMOR (y es JRATIS)

Hoy voy a tratar de analizar (y ser justo) con este ¡¡PEDAZO de juego!!


   (Información importante, dado a que el juego está en constante actualización y este mensaje está escrito el [8/3/2014]. Este análisis corresponde a la versión en vigencia cuando esta entrada fue publicada [19/1/2014] que vendría siendo la 1.07, la versión actual es la 1.07.9.)


   Descubrí este juego hace un año más o menos, mientras buscaba información sobre el Project Zomboid. Por aquel entonces era un mod de Half Life 2 que necesitaba del mismo para funcionar (aunque para los que no lo tenían, ya que era de pago, podrían descargar por Steam el Team Fortress 2). Y también era un auténtico lío para jugarlo, pues o bien metías el juego de marras en Steam de una forma un tanto rollo. O por Desura (mi opción principal, pero no funcionó, ya que "crasheaba" Desura). Y creo que también había un método directo que no llegue a probar. Esto lo ponía en su página oficial.


   Cuando lo probé me quedé asqueado, ya que, aunque no ha cambiado mucho, ahora lo miro con otros ojos. El treinta y uno de octubre fue lanzada la versión standalone (que no hace falta el juego fuente vamos) en Steam y entonces lo probé de nuevo y... ¡oh nena! menudo juegazo.


   Intentaré, y siempre dentro de todo el orden que pueda conseguir, desgranar y analizar todas sus virtudes y defectos:


   Apartado gráfico: Si bien no es un juego con unos gráficos y físicas al nivel de Crysis o Red Faction Guerrilla respectivamente, sí se puede decir que tiene muy buenos gráficos (aunque no sea algo que me importe demasiado la verdad). Aunque el motor Source, es a estas alturas un motor muy pulido y muy asequible para ordenadores antiguos o poco potentes.

   En este caso tiene las limitaciones del motor Source de Half Life 2, un motor con diez años de antigüedad, todo sea dicho. No importa, no buscaremos texturas ultra-realistas en este juego. Hablando de físicas, la verdad es que son las mismas que en HL2, y es algo endiabladamente difícil de describir por escrito.


   Apartado sonoro: No posee mucha música, pero la que tiene lo borda, así de simple. Tenemos el tema del menú de inicio, que es una delicia que evoca a la decadencia y melancolía. Y algún mapa en determinados momentos como Toxteth, ambientado en la lluviosa Liverpool, Londres (sobre todo en el tramo final, hacia la extracción) tiene una melodía con bajo volumen pero que influye en gran medida a la ambientación. El sonido de los disparos han variado un poco en esta última actualización. Los gemidos de los zombies son buenos, no tengo nada especial que decir sobre éstos la verdad.


   Apartado jugable: Y aquí llegamos a la chicha de la obra. Por el momento solo hay dos modos de juego. Uno de supervivencia por oleadas, con tareas que hacer si quieres facilitarte la existencia, pero no obligatorias (en ésto bebieron del modo zombi del CoD). No obstante, prefiero centrarme en el modo de objetivo, que ha sido extraído del Left 4 Dead casi sin ninguna duda.


   Los jugadores comienzan en un punto y deben superar un recorrido plagado de objetivos para conseguir ser extraídos de la zona. Pero ¡Bam! la primera en la frente, cada mapa tiene diferentes rutas y no hablamos de ruta A y B. No, hablamos de varias sub-rutas, que varían en cada partida. Para entendernos, puede que al principio tengamos que ir por un cine para luego pasar por taller y en otra tengamos que pasar por un motel para pasar por un bar. Pero eso no quiere decir que luego no nos hagan pasar por el motel para pasar luego por el taller. Se entrecruzan constantemente, cosa que no se de donde sacaron pero es maravillosa.


   Apenas tendrémos HUD, ni punto de apuntar siquiera. La munición tendremos que chequearla por voz, manualmente, y solo si quieres se mostrará en número el restante de balas un par de segundos (legado de Red Orchestra). El inventario se nos muestra de forma radial y muy intuitivo. Cada objeto tiene su peso y no hay que mirar números como en la saga TES. Tenemos una "rueda" y el peso de cada cosa se representa con el objeto ocupando su peso en ella, no se explicarlo la verdad. Otra cosa interesante, podéis descargar las armas para aprovechar la munición de tres pistolas tiradas en el suelo en una... yo mismo doy mucho asco en esas cosas.

   Tiene un chat de voz, pero está limitado por la distancia. Si quieres comunicarte con un jugador desde donde quieras tendréis que agenciaros unos "walkies". El juego de luz es impresionante. Con total oscuridad en no pocos sitios agradeceréis que algún compañero haya cogido una linterna, pero no os preocupéis, en su defecto tendréis un zippo gratuito y que no pesa... pero no siempre enciende a la primera y en caso de que encienda no ilumina una mierda... imaginaros tener que entrar en una habitación a oscuras y sacar el mechero, tardáis unos fatídicos intentos en que prenda la mecha... y en todo caso no veréis más que un par de palmos más allá de vuestra nariz.


   La munición escasea más que el agua en el Sáhara, y para colmo tendréis que saber que calibre corresponde a cada arma (todas esas horas leyendo como un desgraciado por fin sirven de algo). Por lo que tendréis que pelear cuerpo a cuerpo casi todo el rato con un extenso catálogo de armas. Y cuidado con las mordeduras, podrían infectaros y tener que buscar medicamentos, que, en todo caso solo retrasarán la infección. Los compañeros deberán prestar especial atención a los compañeros enfermos, pues, si no avisan sobre su estado y no se tratan, podrían morir en cualquier momento y levantarse sin que nadie lo sepa.


   Hay tres tipos de zombis:
   -Los lentos de toda la vida.
   -Los rápidos (éstos últimos se dividen en tres)
      -Los que son rápidos y están desperdigados por el nivel.
      -Los compañeros recién levantados.
      -Los niños!!!. Si, no hay nada tan divertido y polémico como matar a un niño que corretea para sacarte los ojos, de un palazo en la cabeza. Los creadores prometieron el la próxima actualización algo aun más retorcido, yo ya me estoy mordiendo las uñas...


   Algo que hace la gente y me molesta especialmente es que la gente compare a No More Room in Hell con Left 4 Dead. Y es que no tienen nada que ver. Mientras que, entre otras cosas, uno es más arcade y se centra en la acción y jugabílidad sencilla, el otro prefiere hacer incapié en el peligro constante, en la precaución y en la supervivencia (aunque este razonamiento tiene muchos fallos, pero no se explicarme). Y es que es esencial que los jugadores cooperen entre ellos, evitando ser avariciosos y compartiendo las cargas de los otros (Pues como el L4D... ¿para que escribo eso entonces?).


   La gente también tiende a quejarse de su jugabilidad, un tanto tosca y poco pulida... yo también opinaba así hasta que reparé en algo. Ésto no hace más que contribuir al objetivo final, la sensación de debilidad. No puedes enfrentarte a toda una horda por el simple hecho de que es difícil hacerlo. En más de una ocasión preferirás hacer la trece-catorce para evitar el enfrentamiento. Ya que como en las películas del género, te agarrarán y te será muy complicado salir de esa de rositas. Un solo zombi puede joderte una partida.


   Para rematar diré un par de cosas más. Tiene muchos y muy buenos servidores (¡Apunta esa RO2!). Está en constante desarrollo y es totalmente gratis, sin micro transacciones ni nada de eso (de hecho, los desarrolladores no aceptan ni donativos). Y es que parece que este juego a surgido de la típica charla de bar entre amigos... amigos que querían crear un juego con las mejores cosas de otros, un juego para que los demás jugasen, para que ellos jugasen. En definitiva, del amor por los videojuegos. Un amor puro y desinteresado solo visto en una madre.


   Y no tengo mucho más que decir la verdad. Recomiendo qué, al menos a quien le guste el género, lo pruebe. Al fin y al cabo es gratis y nada se pierde.


   Un saludo

viernes, 10 de enero de 2014

Estoy increiblemente cansado

   Bueno bueno... desde octubre que no escribo nada.


   Estoy cansado... de ver como la vida hace cada vez más patente su partida del cuerpo de mi amado abuelo, el cual no olvidaré mientras viva... mientras viva esperando en el corredor de la muerte que es la vida.


   Estoy hastiado... de ser pasto de mis obsesiones y mis accesos de ira de los que nadie sabrá el por qué. Pero una oscuridad perniciosa, espesa y enfermiza se apodera de mi ser. Y yo sé que no me va a llevar a ningun lado en el que quiera estar.


   Estoy agotado... de ver como caen y mueren mis idolos... mis muletas existenciales. De verme desplazado en el tiempo y el espacio. 


   Estoy exausto... de verme solo, insignificante y sin fuerzas. De mi inestabilidad emocional. Si tubiera que hacer una historia de mi vida, esta versaría sobre unos hombres bajo sitio, en una ciudad en ruinas. Siempre en inferioridad para luchar, nunca muertos para descansar. Retrasando el más que evidente final, solamente gracias a golpes de escasa y dudosa fortuna.


   Fatigado... de mi esfuerzo por superarme día a día. Solo llego a rozar con mis dedos el dulce perfume de la libertad. La salida a esta situación viciosa e interminable. De tardar semanas o meses en reponerme emocionalmente de un fracaso.


  Borracho de auto-conciencia sobre los derroteros por los que camino. De no tener suficiente fuerza para imponerme y adelantarme a mi situación en esta novela, que solo puede tener un final.


   Un saludo y buenas noches.