Bueno bueno... desde octubre que no escribo nada.
Estoy cansado... de ver como la vida hace cada vez más patente su partida del cuerpo de mi amado abuelo, el cual no olvidaré mientras viva... mientras viva esperando en el corredor de la muerte que es la vida.
Estoy hastiado... de ser pasto de mis obsesiones y mis accesos de ira de los que nadie sabrá el por qué. Pero una oscuridad perniciosa, espesa y enfermiza se apodera de mi ser. Y yo sé que no me va a llevar a ningun lado en el que quiera estar.
Estoy agotado... de ver como caen y mueren mis idolos... mis muletas existenciales. De verme desplazado en el tiempo y el espacio.
Estoy exausto... de verme solo, insignificante y sin fuerzas. De mi inestabilidad emocional. Si tubiera que hacer una historia de mi vida, esta versaría sobre unos hombres bajo sitio, en una ciudad en ruinas. Siempre en inferioridad para luchar, nunca muertos para descansar. Retrasando el más que evidente final, solamente gracias a golpes de escasa y dudosa fortuna.
Fatigado... de mi esfuerzo por superarme día a día. Solo llego a rozar con mis dedos el dulce perfume de la libertad. La salida a esta situación viciosa e interminable. De tardar semanas o meses en reponerme emocionalmente de un fracaso.
Borracho de auto-conciencia sobre los derroteros por los que camino. De no tener suficiente fuerza para imponerme y adelantarme a mi situación en esta novela, que solo puede tener un final.
Un saludo y buenas noches.
No hay comentarios:
Publicar un comentario